Crónica: Abast Grup 1- Typsa 1

Es el fin del camino... La trayectoria del Abast Fumbo terminó ayer noche trás un final digno del equipo: extraño.
El partido transcurrio sin grandes notas a destacar. Typsa basaba su juego en el saque largo del portero y en su jugador estrella que para desgracia mía, compartía mi mismo nombre de pila, hecho que hizo que un servidor creyese recibir órdenes de ambos equipos, de ahí mi bamboleante actuación. Su gol llegó primero, en el único momento en que Puente no estuvo atento al volver a su portería.
La réplica llegó de un tiro de falta del mismodetolasveces, que tocó en un defensor y se coló para desgracia y esnuque de su portero.
De tanto cambiar de campo en la fase previa y en la repesca no teníamos cogida la medida a la portería así que decidimos calibrarla tirando al poste.Tres veces. Para asegurarnos más que nada.
Los otros también probaban de vez en cuando pero entre nuestra últimamente siempre férrea defensa y nuestro portero que parecía que le debiesen dinero, no tuvieron suerte. Y llegó el fin del partido con tablas en las tablas: A penaltis. 3 cada uno.

Metieron ellos, fallamos nosotros y los focos, que, por lo visto, debían ir con nosotros, se apagaron. De pena supongo. Quedaban cuatros penaltis por tirar a oscuras.
Se acordó con los porteros que se tirarían y se tiraron. Su tirador alumbrando con un mechero, localizó el balón y lo puso en el punto de penalty. Entre todos lo fuimos a buscar porque lo había colocado en la otra portería. Tiró. No se sabe qué pasó pero fuimos a buscar el balón a la red y como no estaba supusimos que había fallado.
Como ya habíamos localizado el punto de penalty dejamos a uno de los nuestros ahí con un cascabel y el resto nos fuimos a buscar otro balón. Encontramos varios objetos, a saber: una cazadora, un mechero y una cebolla. Cuando ya estaba colocada la cebolla en el punto de penalty, alguien tropezó con un balón y guiado por el cascabel conseguimos entre todos colocarlo en el punto de penalty. Ya sólo faltaba saber donde estaba la portería. La encontramos por los gritos del portero.
Y como ya sabíamos donde tirar, tiramos y ... pa dentro.
Le atamos una cuerda al balón para no tener que encontrarlo otra vez. Por señales morse con la luz del móvil, el adversario colocó el balón en el punto de penalty... gol.
Nos la jugábamos a una carta. Último tiro. Coloqué el balón en el punto de penalty y le pegue... a una botella de Aquarius. Localicé a mis espaldas al resto de mis compañeros ,que gritaban buscándome. Por lo visto no me tocaba tirar. Colocamos el balón en su sitio. Tiramos... y al poste. Por fuera. El campeonato se esfumaba entre los dedos, aunque no podíamos verlo.
Estrechamos la mano del contrario y nos besamos en la boca porque somos muy deportivos. Y cada cual a su casa y dios en la de todos.

Igual que no fue, podía haber sido. Creo que estamos contentos con el campeonato que hemos hecho y algunos con el tipín que se nos ha quedado, que el deporte es lo que tiene.
Por lo demás y ahora sí, por este año se acabó. Como tenemos las camisetas, a lo mejor el año que viene nos dedicamos otra vez a dar unas patadas.

Hala, besos para todos los que han venido a animarnos y tambien para los compañeros de Abast.